Diciembre 31, FIN E INICIO DE AÑO; día mágico que nos insufla amor, optimismo, buenas intenciones, nuevas decisiones y alimenta el recuerdo inolvidable de quienes se han ido.
Cumpliendo con el Padre Nuestro, pedimos perdón y perdonamos; y al saludarles deseamos de corazón sean bendecidos con: más vida, salud, amor, familia, felicidad y muchísimo Éxito.